domingo, 20 de diciembre de 2009

Tenemos un nuevo idioma

Sí, amigos y amigas. Los leoneses, en nuestro rico patrimonio cultural, tenemos un nuevo idioma. Prepárate Pardo porque tu leonés es de lo más lamentable comparado con este idioma que, afortunadamente, yo os voy a desvelar por completo en su gramática con ejemplos y todo.
De entrada: ¿qué idioma es? no es castellano, no es leonés, no es caló, ni el chino de los bazares. Es...el upelés.
Sus orígenes se remontan en la noche de los tiempos, más concretamente a los años 90 del siglo XX. Son muchos los filólogos que dicen que no es un idioma sino un dialecto ampliamente extendido entre la sociedad leonesa y especialmente entre nuestros políticos en cuanto toman un cargo. Yo sostengo que tiene suficientes rasgos distintivos como para ser un idioma, y me acojo a la definición que hace de "idioma" la wikipedia, la otra alternativa a la llionpedia.
Para empezar es practicado por una comunidad humana, no muy numerosa, pero con amplias simpatías entre la sociedad leonesa. Se caracteriza por presentar una serie de rasgos propios identificativos, tanto de gestos como de palabras, que lo hacen único y diferente a los demás. A ello añadiremos la amplísima literatura, obras teatrales y otros hechos escritos que le otorgan relevancia histórica a pesar de su relativa breve historia.
Es un idioma que está gozando de amplia presencia mediática, mayor que la que quisiera el Gancedo para el leonés, e incluso comienza a haber nuevos escritores y hablantes de esta particular lengua. Se caracteriza por rasgos muy simples pero plenamente identificativos, a saber:
de entrada nada de lo que se dice y se afirma se mantienen en el tiempo. Si, por ejemplo, citando una frase completamente al azar, se dice que el PSOE utiliza un falso leonesismo para captar votos de UPL, después se pacta con ellos y se afirma que lo que se hace es remar en la misma dirección. Si una persona es mala, traidora, engañosa, que ha llevado a la ruina a un colectivo de personas por sus actos y palabras, es perfectamente posible que con el tiempo no solo ya no lo sea sino que se convierta en todo lo contrario y hasta puede volver a ser admitido en su antigua comunidad incluso si ya ha formado otra que ha entrado en guerra con la primera. Si otra persona es culpable de todos los delitos habidos y por haber, si es más dañino que el cianuro en la sopa y es un grave daño para un colectivo humano por promover o escribir cosas que no agradan pero son de lógica en la comunidad, es echado y defenestrado aunque un juzgado diga lo contrario, para luego hablar de él en pasado y diciendo que no su maldad no era para tanto. Si se clama a la constitución como máximo exponente de libertades pero se expulsa a un miembro de la comunidad y la justicia dice que es anticonstitucional, no importa porque estos hablantes seguirán diciendo que la constitución no importa y sí su opinión particular.
Otro rasgo que lo distingue es el uso de dos palabras machaconamente (Pucela y Castilla) mientras se conjugan insistentemente verbos como "marginar", "defenestrar", "robar", "estafar", engañar", y otras palabras que lo acompañen como "referendum", "libertad", "voz", junto a negaciones y afirmaciones varias en pro de la comunidad que representan. Algunas subvariantes incluyen términos despectivos y defenestrantes que no hacen sino reforzar sus posiciones aun cuando caigan en el error propio. Y es que a esta comunidad le gusta hablar de ello pero jamás se ha visto a ninguno de sus hablantes ejercitar tales verbos.
Hay grandes escritores en esta lengua. Por ejemplo Luis Herrero Rubinat, que elevó a la sublimación la palabra "Valladolid" durante sus años como diputado en la diputación de León. Joaquín Otero, famoso rapsoda berciano, ha sabido utilizar como nadie la sintaxis cambiante y opositoria del upelés en todos los ámbitos donde ha tenido cabida. Otro escritor, con poca literatura escrita y sí mucha oral, es Melchor Moreno, donde destacaría su brillante obra llamada "Caja España": en ella demostró que el uso de la sintaxis contraria donde pidió que las sedes estuvieran en León (entiéndase provincia de) y ahora pide para Zamora "algo". La misma brillantez la demuestra Javier Chamorro en el uso de la sintaxis upeliana donde no ha tenido reparos en demostrar "asco y desprecio" por la llionpedia calificándola de nazi, pero a la vez mostrar simpatía y comprensión por la bandera franquista pues ambos regímenes son completamente diferentes y para nada fueron aliados ni simpatizantes o comulgantes en muchos de sus principios. Por último uno de los veteranos de la literatura upeliana, José María Rodríguez de Francisco, padre de las letras upelianas, que ha usado magistralmente la sintaxis y gramática upeliana como nadie. Léase la época en que Pardo era un "pequeño mussolini" y ahora es "un verdadero leonesista".

martes, 15 de diciembre de 2009

Cataluña is not Leon

Me gusta pasear por las tardes por las calles de la ciudad y observar a la gente. Especialmente tras una gripe que me tuvo en cama por dos semanas y otras dos más de recuperación. Y especialmente por el centro de las ciudades porque se ven a muchas caras conocidas, especialmente de la política. Hoy en concreto, en este día tan frío me encontré con mi nunca bien ponderada Gema Cabezas, flamante superconcejala tras despojar de todo a mi apreciado Pardo: de obras, promoción industrial y nuevas tecnologías. Solo hay otra persona que al consultar la web del ayuntamiento de León le gane en extensión en cuanto a cargos: Javier Chamorro. Comprobadlo. De vicenada a mandamás. Y es que hoy ponían las luces de navidad. Ooohhhh.....
Y allí estaba mi mujer Tous sonriendo falsamente a unos pocos periodistas que todavían creen que poner cutres luces por la ciudad o un ridículo abeto en la plaza de la catedral merece un espacio informativo. Y además acompañada de concejales socialistas, para que el pacto se note hasta en lo íntimo y cotidiano ¡Cuánto echo de menos esas ruedas de prensa en solitario de mi amigo Pardo! La dignidad y lealtad a unas siglas tiene un precio caro.
Y supongo que la señorita Gema, tan preocupada ella de que no la llamen radical ni cosas tan feas como leonesista, tal y como dijo a unas personas en la última cena upeliana, seguro que se está comiendo los hígados por dentro al enterarse de la última ocurrencia de la directiva upeliana: un referendum al estilo del que se está haciendo en Cataluña.
Imagino que tras una copiosa cena llena de comida típica leonesa (de nuevo, ironía) y posar ridículamente en una foto para enviar a prensa donde se añadieron cifras exageradas de comensales y declaraciones debió hacer en la superintimidad el sr.Chamorro, el superconcejal y su aliado Melchor Moreno debieron beber demasiado vino y champán. Eso provocó la apertura de oídos y algún comeorejas de turno les debió decir que cómo prosperaban los catalanes pidiendo referendums mientras los leoneses estábamos así. Y como siempre he dicho, en el leonesismo oficial y de foto se dice o la primera subnormalada que se les cruza por la cabeza o la última estupidez que los pelotas de turno dicen al oido.
Literalmente así lo manifestó Chamorro, "alguien" le sugirió el referendum durante la cena ¡toma castaña! Si Chamorro no es espabilado el/la/los/las sugerente/s de la idea tampoco es que manejen muchas luces.
Veamos...
Cataluña es muy diferente al País Leonés en miles de cosas: no se avergüenzan de lo propio incluyendo la lengua, tienen una clase política catalanista bastante más formada y con mayor tradición parlamentaria, su sociedad es mucho más abierta y tolerante, creen en la mediana y pequeña industria heredable a hijos y nietos, piden, reclaman y saben negociar para conseguir beneficios en pro del autogobierno. En definitiva, saben detrás de lo que andan. Y saben que plantear esa consulta, NO VINCULANTE Y SIN VALIDEZ LEGAL (en mayúsculas para que quede claro) es solo un ejercicio de demostración de que en Cataluña el sentimiento catalanista e independentista es amplio.
Ahora llevemos el mismo caso a Cazurrilandia: de entrada los políticos leonesistas son gente tan bien formada como fruteros, entrenadores de futbito de pueblo, basureros, maestros de escuela rural...que sin desmerecer ninguna de esas profesiones al menos indican que su formación académica no es su mejor carta de presentación. Los otros son abogados, esa profesión que vale para todo lo que sea dinero, poder y mandar (Otero, Rubinat, Chamorro, De Francisco...). El referendum, de hacerse, sería gracioso ver en qué lugares se hace ¿ayuntamientos con representación leonesista? ¿en todos los ayuntamientos? ¿en qué provincias? Y la pregunta final ¿para qué organizar semejante tinglado si al final no valdrá ni como referencia social?
Somos bastantes las personas leonesistas que creemos que si entramos a la fuerza, a la fuerza salimos. Otros en cambio quieren ser más papistas que el papa y piden democracia y referendum para demostrar que no somos lo que nadie es en realidad. Esas cosas se pedían hace 20 años, no ahora. Esas cosas las proclamaban los portavoces de un leonesismo rancio del cual no quiero ni acordarme de nombres. Pero hoy, en el 2009, con las tortas que están lloviendo en UPL, lo que menos debe hacer lo que queda de partido es decir idioteces fruto de una borrachera mental y física.
Y es que al final todo quedará en una borrachera mal pasada, redactada a los medios por una responsable de prensa que tanto hacer la pelota está tomando la forma de la misma. Otro globo sonda que ni saben decir ni aprovechar salvo para hacer el ridículo.
Juan José Lucas, ex presidente del ente autonómico, lo dijo muy claro: "ustedes tendrán autonomía cuando puedan hablar por boca de la mayoría de los leoneses". O dicho en paladino: cuando UPL (u otro partido leonesista) sea la fuerza mayoritaria en el País Leonés, se podrá pedir lo que nos dé la gana.
Pero ahí siguen, viendo la vida pasar. Rodeados de leales incondicionales que intentan dar una imagen falsa de trabajo, seriedad y leonesismo. Y el trabajo se les acumula: Chamorro tiene dos secretarios, una Miriam Ferreras y un Luis Mariano Santos a la par secretario de organización. A ello sumemos una responsable de prensa llamada Carmen de Celis que hace lo indecible por controlar los medios y críticas que le llueven a nuestros upelianos pailanes. Y si tres personas os parecen poco pongamos también a otra más llamada Susana Núñez que tras la marcha de Pardo está un poco en tierra de nadie. Pero todavía nos queda otra secretaria más para Gema Cabezas que se limita a tramitar citas y documentos a firmar. Pero si esto es poco queda un Fernando Martínez Vega que mantiene la patética web de UPL (que en realidad es un blog) donde se ha cebado lo que ha querido y más con Pardo (lealtad ante todo) y se dedicó durante largo a mandar hasta correos con su foto para todos le conocieran.
Pero en esa lamentable web hay una foto que me gustaría comentar largo y tendido, la que se ve aquí. Es hora de que se empiece a decir cosas de esas personas. Cosas que no les va a gustar que se digan o que se recuerden. Hoy no. Pero esto, como otras tantas promesas que he hecho, las cumpliré. Palabra.